Condenados los menores que torturaron y asesinaron gatos en Tarragona, denunciados por LIBERA!
Tarragona -
14/03/2011
LIBERA! presentó denuncia por los siguientes hechos: el
día 16 de noviembre de 2008, integrantes de la Asociación Refugi de
Perla, que vela por el bienestar de los animales, se trasladaron como
cada fin de semana a la colonia de gatos situada en una casa antigua de
Tarragona, con el fin de darles alimento y compañía. Con gran disgusto,
se encontraron con un gato de apenas 3 o 4 meses, muerto, con sangre en
la cabeza, así como otra hermana de dicho gato, agonizando.
El día 17 de noviembre hallaron más gatos muertos, fallecidos de
igual manera que los anteriores, es decir, con impactos de balines o
perdigones en la cabeza. El día 18 de noviembre la escena se repitió con
un gato muerto con impactos de perdigones y un fuerte golpe en la
cabeza y otro gato pequeño con heridas en el cuerpo provocadas por los
perdigones. El día 19 de noviembre, personas del vecindario advirtieron a
la Asociación que estuvieron escuchando tiros en el mismo lugar y que
habían visto a muchachos jóvenes por los alrededores de la casa. El día
21 de noviembre, aparecieron más gatos, los cuales incluso habían sido
objeto de una violencia más extrema, si cabía: sus cuerpos estaban
reventados, con destornilladores en el costado, con la cabeza aplastada
supuestamente a martillazos, con perdigones por todo el cuerpo, etc. Esa
misma tarde, una compañera avisó que estaba escuchando tiros cerca de
la casa. Avisado un socio de la Asociación, se dirigió a la casa y vio a
tres personas saliendo a toda velocidad del interior del habitáculo en
dirección a Sant Pere i Sant Pau, y dejando olvidada una mochila que
contenía perdigones y demás elementos utilizados para torturar a los
animales.
Finalmente, se ha celebrado el juicio a dos menores que fueron
quienes cometieron todos estos delitos; el juez los ha declarado
culpables, y los ha condenado a 9 meses de libertad vigilada (el fiscal
pedía un año). Asimismo, están obligados a realizar un curso formativo, y
se les ha condenado a pagar 1.500 euros al Refugio La Perla por daños
morales, y 253 por gastos veterinarios.
La información recogida en el
Diari de Tarragona, explica además que:
"Inicialmente, el fiscal sostenía que los dos procesados –en compañía
de un mayor de edad pendiente de ser juzgado– habían entrado en el
recinto en cinco ocasiones, en las cuales habían torturado a los
felinos. El juez, sin embargo, apunta que sólo ha quedado probado que
fueron dos veces: en el mediodía del 15 de noviembre de 2008 y en la
tarde-noche del día 21. Durante el juicio, los dos menores negaron
cualquier responsabilidad y aseguraron que el autor fue el mayor de
edad. Pero para el juez, el hecho de que los tres fueran juntos indica
que «todos ellos eran conscientes de lo que ocurría y pasaba»."
"En los dos días en que ha quedado probado que fueron torturados los
gatos, los jóvenes fueron vistos salir del recinto por unos testigos. El
juez considera que acudieron al refugio en los dos días señalados y no
sólo dispararon a los gatos sino que incluso clavaron un destornillador a
uno y quebraron las patas a otro.
El magistrado tampoco considera creíble –como ellos aseguraron durante
el juicio– de que iban a hacer prácticas de tiro disparando a latas, ya
que para ello «puede escogerse cualquier otro lugar». En la sentencia se
recoge que «en el refugio no se encontraron latas con perdigones
incrustados sino gatos con perdigones incrustados y gatos torturados».
Uno de los procesados dijo que se quejaba de lo que pasaba o no le
gustaba. Para el juez, «con no acudir tenía bastante». Y añade: «El
hecho de acceder al refugio en compañía de los demás en diferentes días
es indicador de que se estaba plenamente de acuerdo con el maltrato a
los gatos»."
